El ácido bórico es un químico débil constituido por oxígeno, fósforo e hidrógeno, una combinación de elementos útiles para el tratamiento del pie de atleta.
Esto se debe a que sus características antifúngicas y su bajo nivel de acidez, contrarrestan el daño de los hongos sin lesionar la piel.
Aunque los usos del ácido bórico van desde combatir insectos, hasta reducir el moho o desinfectar áreas contaminadas, es sin duda la industria farmacéutica, una de las que más ha sabido aprovechar todos sus beneficios.
¿Cómo usar esta sustancia química para curar el pie de atleta?
Esta sustancia química, cuya fórmula es H3B03, proviene del átomo que tiene el boro, se puede diluir en agua y carece de olor.
Generalmente lo podemos hallar como un polvo blanco, y es precisamente en esa forma, que lo podremos utilizar para curar el pie de atleta.
Solo se necesita diluir una cucharada grande de ácido bórico en unos 3 litros de agua tibia, la cual debe estar completamente limpia.
Después de mezclarlo, se debe depositar en un recipiente lo suficientemente grande para meter los pies por un tiempo aproximado de 20 minutos.
No obstante, es imprescindible lavarse previamente con agua, jabón y secarse bien antes de poner los pies a remojar.
Al finalizar el tratamiento, es necesario volver a secarse los pies con una toalla limpia, asegurándose de extraer el agua entre los dedos, y aplicar un poco de polvo bórico en los calcetines o zapatos antes de usarlos.
Causas y síntomas más comunes de esta enfermedad
El pie de atleta es una enfermedad que se puede adquirir fácilmente al caminar descalzo en superficies contaminadas, o usando zapatos y calcetines húmedos.
Entre otras causas, se encuentran la sudoración excesiva y el aumento de la temperatura mientras se usan calzados muy ajustados.
Es una afección bastante contagiosa que genera síntomas como erupciones rojas y escamosas, picazón, y piel reseca que incluso se parte provocando dolor.
Otros beneficios que tiene el ácido bórico en la salud
Además de su utilidad para sanar el pie de atleta, existen otros beneficios del ácido bórico, ya sea empleándose en infecciones vaginales, oculares y acné.
En este sentido, se pueden usar cápsulas vaginales con este tipo de químico para combatir las levaduras, como, por ejemplo, la Candida.
Por otra parte, el ácido bórico es un aliado inigualable cuando se trata de aliviar irritaciones, inflamaciones o infecciones en los ojos, pero, para ello, es necesario diluir bien esta sustancia en agua antes de aplicarla sobre la zona afectada.