Ácido fosfórico. Usos y aplicaciones

Este compuesto o sustancia química fue descubierto hacia el año 1777, sin embargo, por  muchos años no tuvo aplicaciones ni uso alguno. Inicialmente comenzó a utilizarse en la fabricación de fertilizantes. Constituye hoy por hoy una fuente de componentes de significativa importancia industrial y pertenece a los llamados fosfatos que complementan el ácido fosfórico.

Cuando se encuentra a temperatura ambiente es una sustancia cristalina de densidad relativa que puede obtenerse por el tratamiento de rocas de fosfato de calcio con ácido sulfúrico, al cual se le filtra el líquido obtenido para extraerle el sulfato de calcio puro. También se encuentra presente en la naturaleza en varias frutas y vegetales.

Propiedades del ácido fosfórico

Entre las propiedades de este compuesto químico, tenemos:

  • Posee densidad relativa al agua
  • Solubilidad en el agua
  • Resistencia a la oxidación
  • Resistencia a presiones de vapor
  • Densidad relativa al vapor
  • Se almacena y distribuye en estado de disolución

Usos del ácido fosfórico

          

Uno de los principales usos del ácido fosfórico tiene que ver con la formulación de fertilizantes y detergentes. Adicionalmente se emplea como ingrediente de bebidas gaseosas no alcohólicas, de pegamento para protesis dentales, como catalizador para reacciones químicas y en fosfatos para ablandar las aguas. En el sector industrial, se le utiliza para remover óxido de superficies metálicas.

A la fecha ha sido ampliamente utilizado en las industrias de los siguientes rubros:

  • Agropecuario
  • Agentes de limpieza (detergentes y jabones)
  • Alimentaria (bebidas gaseosas)
  • Metalúrgica.

Aplicaciones del ácido fosfórico

  • La producción de fertilizantes complejos.
  • En la producción de fosfato mono amónico, que contiene nitrógeno y fosforo.
  • En la fabricación de detergentes, jabones, desengrasantes y diversos agentes de limpieza.
  • Como acidulante en la producción de alimentos destinados a la industria ganadera y de mascotas.
  • Como saborizante en bebidas, mermeladas, quesos y jaleas.
  • Para limpieza y mantenimiento de superficies metálicas.
  • En el tratamiento de metales y abrillantamiento del aluminio.
  • Aporte de fosforo en el tratamiento de aguas residuales.
  • En la obtención de fosfatos metálicos.
  • Como regulador del ph en la fabricación de fosfatos.
  • En la producción de fosfitos para el tratamiento de aguas.
  • En la preparación del fosfito de potasio.
  • Como agente reductor de análisis químicos.
  • Como ingrediente en la producción de aditivos utilizados en la industria del cloruro de vinilo (conocido como poli).

Comentarios cerrados.